Saltar al contenido

El porqué de los escorzos y las sombras

Cuando pregunten si me canso de las piedras, los vaivenes, las caídas. Si me canso de tropiezos, de requiebros y derrotas. Cuando pregunten a qué tanta farola tenue, a qué la soledad, el porqué de los escorzos y las sombras. Diré que no he perdido, si preguntan. Diré que no he ganado. Todavía.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

dieciocho − dos =

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.